Sigo sin entender como aquel sentimiento de redencion que transita en nuestro cuerpo una vez que sentimos la paz girar a nuestro alrededor aun no lo haya terminado de asimilar.
Hace un par de años mi hermana mayor y yo nos sumergimos en una discusion que nos mantuvo separado durante 3 años. Durante ese tiempo ninguno de los dos nos dirigiamos la palabra, ni mucho menos si nos encotrabamos por la calle se podia imaginar uno que nos levantariamos la ceja en menospreciante señal de saludo.
Nada de eso, recibia rara vez informacion sobre ella a traves de amigos o familiares a lo que yo me negaba y sin dejar terminar de hablar a mi preocupado y sorprendido mensajero este solo cambia de tema.
Por esos dias yo pensaba que no era indispensable para mi precindir de ella o de mi sobrino que por ese entonces tenia seis años y solo me conocia de vista. Meses mas tarde naceria mi segundo sobrino que no vi hasta despues de 9 meses de nacido.
Los primeros dias de julio del año 2006 llegaria mi madre de U.S.A a quien no veia desde hace seis años. Conoci a mi nuevo hermanito de seis años. La representacion latinorteamericana de Satanas. Asi la familia habia crecido en numero pero no en union.
En una conversacion que tuve una noche con mi madre me animo a que me sentara a conversar con mi hermana y dejar todo atras. Asi lo hicimos esa noche mi heramana y yo estrechamos la mano y nos fusionamos gracias a un fuerte abrazo. Desde ese dia frecuento a mi hermana por lo menos tres veces a la semana. Esa vez senti la mayor tranquilidad y paz espiritual que nunca habia experimentado,me senti tan bien de ser nuevamente su hermano.
Ahora a pocos dias de irme se me parte el corazon, la vida y el alma ir a su casa y decirle... Nos vemos.
Termine de escribir esto escuchando:
R.E.M -_- Stand
