Adecuandome paulatinamente a mi nuevo modo de vivir hice lo que cualquier persona hace cuando comienza un cambio y deja algunas cosas atras. Busca a un par de amigos y beben hasta reducirse a la nada. Asi lo hice junto con tres amigos mas. Bebimos y bebimos escuchando el mejor repertorio de mi Ipod, calro que me obligaban a cambiar las canciones que ellos decretaban como depresivas, muchas veces se cometieron injusticias pero al final algo de alegre pop punk siempre hace que el licor se digiera mucho mejor. En un momento fui señalado como un depresivo melancolico, lo cual no se alejaba mucho de la realidad pero me encuentro en proceso de cambio, a lo que yo respondia que el Indie es una suave melodia no precisamente depresiva. Nadie me hacia caso. Ni cuando defendi a Bob Dylan pude quedar parado, esta vez fui acusado de melancolico alienado, si tanto me gustaba el folk debia de escuchar yaravies. Malditos chauvinistas.
Al final fue una noche que valio la pena bebimos demasiado me senti muy bien, de un momento a otro aparecimos en en centro comercial Risso. La verdad es que hasta ahora ninguno de nosotros se explica como dimos a parar ahi. Es un misterio, por lo menos para mi no tengo ni un solo recuerdo de haber tomado un taxi, caminado o secuestro espacial.
Llegue a mi casa cerca de las 6 d ela mañana. Entre a mi habitacion y por esas cosas del destino y lo ebrio que me encontraba termine haciendo una soberana bulla que incluia una taza rota, varios cds al piso y creo que lo ideal hubiera sido pisarle la cola algato,pero como no tengo uno con la taza fue mas que suficiente.
El resultado del dia siguiente fue otra de las soberanas puteadas de mi abuelo... creo que en este mes ya van dos de esas...una mas y me botan de casa... estoy seguro de eso. Maldita taza, imbecil quien la puso ahi.. la respuesta a todo siempre es y sere yo.
Termine de escribir esto escuchando:
La tercera republica -_- Me rindo
sábado, 19 de abril de 2008
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